Pablo Nieto

Sentido drama sobre el Holocausto judío en Hungría, dirigido por Lajos Koltai. Reputado director de fotografía húngaro, que debuta como director en esta película.

Que Ennio Morricone ponga música a este film, no es algo que nadie deba sorprender. A la hora de involucrarse en una película, Morricone suele tener siempre muy claro lo que quiere: valorando primero si le gusta el guión, y luego si le pagan bien. Analizando su filmografía, seguro que el segundo supuesto es el que más ha tenido en cuenta a lo largo de su carrera.

"Fateless" sin embargo, no es el típico bodrio musicado por el Maestro romano. El dinero puede comprar muchas cosas, pero nunca la inspiración. Y cuando a Ennio le dan una historia para lucirse, nunca defrauda.

Sin duda, nos encontramos ante una de sus mejores trabajos de los últimos años. Un score de corte dramático, que no llega a caer en ningún momento en lo deprimente, y que potencia la melodía y el colorido de la instrumentación, en claro contraste con el dolor de las víctimas.

Un omnipresente tema central es el eje sobre el que gira la partitura. Cuerdas y vientos madera confluyen en una de esas melodías eternas del Maestro. Un tema que abrirá y cerrará el disco ("Fateless"), y que será repetido en cortes como "At Table"o "About Solitude", donde viene presentado por medio de interesantes variaciones melódicas e instrumentales.

Otro de los alicientes de este score, es la presencia de Lisa Gerrard. La musa de Zimmer, se convierte en la perfecta sustituta de Edda dell´Orso, para ejecutar los solos de voz y lamentos femeninos escritos por Morricone. La voz de Gerrard, perfectamente acomodada dentro de la masa orquestal y coral concebida por Morricone, desarrolla con virtuosismo el segundo tema de la película. Un motivo elegante y profundo, escuchado en “Return to the Life" y "A Song", y que presenta ciertas connotaciones religiosas. Algo, a lo que sin duda contribuye, la sobrecogedora interpretación de Gerrard, y el uso del órgano.

Conviene hacer también mención, a estupendos cortes incidentales como "The Field", donde se introduce un interesante tema de peligro, o "To Return and To Remember", de aire desenfadado y con ciertas reminiscencias a la música tradicional húngara, y convertido en un dramática elegía en "Voiceless".

Sería negar la evidencia no establecer paralelismos entre "Fateless" y la tonalidad, la atmósfera y la melodía de trabajos como "Días del Cielo", "Marco Polo" y sobretodo, el injustamente rechazado score de "Más allá de los Sueños". Sin duda, los admiradores de estos trabajos, están de enhorabuena con "Fateless". Aunque no mucho más que los millones de aficionados que aman la música de cine, gracias a Morricone.