José-Vidal Rodriguez
Sábado, 1 de Julio de 2006. Bajo un calor asfixiante, el Teatro Monumental presentaba un lleno a rebosar para presenciar el que sería el concierto clausura del I Festival Soncinemad de Música de Cine de Madrid. Dos grandes del panorama musical se daban cita en el viejo Monumental: por un lado, Mr. Trevor Jones, todo un lord inglés pese a su procedencia surafricana, además de un hombre muy afable en las distancias cortas. Por otra parte, la Orquesta Sinfónica y Coro de Radio Televisión Española, una agrupación de músicos de innegable prestigio en el ámbito clásico, pero poco prolífica en lo que a repertorio de soundtracks se refiere.
El resultado de esta, tan a priori sugerente mezcla, no sólo la pudimos disfrutar los asistentes a aquella mágica noche. Afortunadamente, el compositor acaba de lanzar en forma de doble CD promocional, la estupenda grabación íntegra del concierto, presentada bajo un sonido espléndido a la par que una maquetación bastante mejorable (horrorosa la foto de portada). Un defecto disculpable que no debe retraer a los aficionados, ya que estamos ante un sensacional recopilatorio, absolutamente imprescindible para los seguidores del autor que no pudieron degustar el concierto en vivo y en directo.
Lo cierto es que cuando a las 20:05 h. de la tarde arrancaron los primeros acordes del “Cliffhanger”, nadie podía imaginar el impresionante espectáculo sonoro que más de un millar de asistentes estaban a punto de paladear, y que sólo puede calificarse con un adjetivo: Imborrable. La sorpresa inicial fue comprobar que el propio Jones dirigiría la orquesta, labor que en sus scores de estudio suele delegar en su fiel colaborador Geoff Alexander. Pero Trevor demostró coraje y valentía, aún cuando de su “novata” batuta surgieron varios de los pocos errores de ejecución de la RTVE, perfectamente disimulados en las mezclas de estudio a la vista del impecable acabado sonoro del álbum.
El comienzo con el “End Credits” de ”Cliffhanger”, ese tema tan afortunado como a la par deudor de “El Último Mohicano”, presagia ya el enorme despliegue de medios de la orquesta española. Cuerdas perfectamente conjuntadas, metales engalanando de forma brillante la frase principal, y esa rotunda percusión de la que tanto gusta Jones, enfatizando la ampulosidad de la pieza, de forma muy similar (sino mejor) de la que lo hizo la London Philharmonic en el disco original.
Para la suite de "Merlin", uno de los mejores trabajos televisivos del autor, el compositor escoge las piezas en las que más hincapié se hace a la maravillosa frase central épica, en detrimento de otros cortes más agresivos que poblaban aquel magnífico score. El elegíaco “Ambrosia Dies” conforma el preludio a la rendición del main theme escuchada en “Re-united”, que al igual que en el álbum oficial, supone uno de los instantes de mayor emotividad de la partitura, mostrándose la RTVE de nuevo a la altura de las circunstancias.
"Roseanna´s Grave" es una curiosa comedia de tintes lacrimógenos, sobre los esfuerzos de una mujer a punto de morir (Mercedes Ruehl) por hacerse con la única tumba libre al lado de la de su hijo en el cementerio de una pequeña comarca, lo que llevará a su marido a tratar de evitar, a base de tenacidad e ingenio, toda muerte anterior a la inevitable de su mujer (gran interpretación del hierático Jean Reno). Editada en su día bajo el nombre “For Roseanna”, el score nos muestra a un Jones tremendamente pasional y romántico, agraciado aquí de un gusto exquisito por la melodía en estado puro, directa, sincera, como comprobamos en el desarrollo a piano de la hermosa frase central (“Roseanna´s Theme”). La guitarra y el acordeón aportan ese carácter regional a la música -no olvidemos que el filme se desarrolla en una aldea italiana- en cortes tales como “Antonio Looks For Cecilia” o el precioso popurrí de leitmotivs del “End Credits”, uno de los highlights de todo el concierto, con la orquesta en pleno rugiendo al compás de la delicada melodía principal, cuyo acabado aquí resulta tremendamente elegante.
”Aegis”, cinta de acción japonesa cuyo correcto score tuvo sin embargo gran repercusión (alzándose incluso con varios galardones allá por tierras niponas), encuentra su correspondiente hueco en el concierto con aquél fragmento escuchado en el epílogo del filme, que incluye el tema central en clave dramática, sobrio, francamente eficaz en el contexto de la película, pero quizás un tanto alejado del mejor Jones. Sea como fuere, el corte escogido (equivalente al “Remember the Past” del disco oficial) es lo suficientemente retentivo y elaborado como para no desentonar en el conjunto del repertorio.
La gran desconocida de este primer CD es la obra ”The Last Place On Earth”, partitura escrita en 1985 para una miniserie de Ferdinand Fairfax (a quien Jones ofreció años antes el magnífico e inédito score para “Savage Islands”), que narra la historia real de la conquista del Polo Sur, incidiendo en la rivalidad entre el noruego Roald Amundsen y el británico Robert Falcon Scott sobre cuál de los dos lograría explorarlo primero. El trabajo permanece inédito en formato digital (fue publicado en vinilo y se conoce la existencia de un parco bootleg que no es sino un ripeado del LP), circunstancia que explica el hecho de que buena parte del público ignoraba la grandeza de su “Main Theme”. Prologado por un efecto sonoro que emula una ventisca, la pieza alcanza de manera ejemplar el grado de épica necesario para evocar musicalmente un reto para el hombre como fue aquél sobre el que gira la trama. Grandeza que torna en vitalidad ante la sutil intervención de las voces femeninas en el “Norwegian Theme”, vivaz melodía ligada al carácter más abierto y jovial de Amundsen y su equipo, que encuentra su contrapunto en el “Chamber Ensemble at Mabel Beardsley´s Soiree”, ofreciendo Jones una música de corte más clásico y elitista para el entorno de la expedición inglesa. Gran trabajo en definitiva, que esperemos algún día vea la luz en compacto oficialmente.
Tras el merecido descanso de rigor, un sudoroso Trevor Jones se subía de nuevo al escenario para proseguir con el repertorio. El segundo CD se abre con la obra más comercial del surafricano, ”The Last of the Mohicans”, un arma de doble filo para la RTVE en cuanto a que, por su popularidad, sería la versión que más fácilmente compararía el público con respecto al original. El resultado no puede ser más brillante para la orquesta, captando con suma facilidad la espectacularidad del inolvidable “Main Title” (expandido aquí y cuya percusión rítmica final, arreglada ex profeso para la ocasión, resulta a todas luces impresionante); encumbrando al concertino de la RTVE con su solo de violín para “The Kiss”; y apabullando al público gracias a una explosiva reinterpretación del “Fort Battle”, vibrante tema con una percusión y unos poderosísimos metales comparables a las mejores orquestas dedicadas al cine (y que, aun cuando en su arranque sonó un tanto deslabazado en directo, Jones se ha preocupado muy mucho de corregir en el álbum).
Uno de los momentos más emotivos de la noche fue la ejecución de esa rotunda masterpiece del autor llamada ”The Mighty”. Siete minutos que saben a poco, pero que aún así son suficientes para demostrar la brutal inspiración del compositor, en esta obra compuesta en un 1998 ciertamente fructífero para sus intereses. La dulce voz de la soprano Paula Alonso Martín, y unas cuerdas que ejemplifican de nuevo el enorme grado de cohesión de la RTVE, se aúnan para entonar el famoso y rabiosamente bello “tema del Caballero”, cuya pulcra ejecución logró arrancar las lágrimas a no pocos de los asistentes.
"Fields of Freedom" es la única obra inédita (al menos a fecha actual) del repertorio, cuya interpretación por la RTVE constituye el estreno en primicia mundial del score escrito en este 2006 para un filme sobre la famosa batalla de Gettysburg, dirigido por un desconocido David de Vries. La pieza, en su intención elegíaca, sigue texturas cercanas al tema de “Aegis” oido en el primer CD, aunque aquí se ve salpicada por bellas acotaciones corales femeninas en tono nostálgico, denotando su frase central un conato de patriotismo comedido a las cuerdas.
El álbum prosigue con la extensa suite de ”The Dark Crystal”, obra un tanto sobrevalorada pero que sin duda marcó la carrera del compositor y no podía faltar en el repertorio. El grado de fidelidad al original es de nuevo elevadísimo -sublimes otra vez los metales-, si bien la duración de la pieza se me antoja un tanto excesiva, pudiendo haber aprovechado Jones para acortarla y en su lugar ofrecernos alguna otra de sus magníficas partituras inéditas (siento insistir de nuevo en el “Savage Islands”). Particularmente acertado es el lirismo in crescendo del “Love Theme”, que vuelve a calcar la orquesta respecto del original.
La ovación que escuchamos en el “Finale” de este “Cristal Oscuro” no es sino el preludio de la apoteósica despedida que recibió tanto Jones como la RTVE en el bis con el que el músico obsequió al respetable. Efectivamente, tras el protagonismo de la guitarra en la última pieza anunciada en cartel, la sencilla y delicada ”Dominic & Eugene”, llegó la hora de terminar de sorprender a los asistentes: bajo el título de “Axel Heiberg”, el surafricano adapta el tema principal de ”Last Place On Earth” para reconducirlo a una marchosa y contundente versión rítmica a batería y coro, aderezos que arrancaron el entusiasmo final del público, ante lo que era el broche de oro de una noche que, al menos para el que esto escribe, quedará grabada en la memoria de por vida.
Dos conclusiones claras se pueden extraer de la publicación del presente álbum: que todos los españoles debemos sentirnos orgullosos del impacto que ha supuesto el concierto entre los aficionados de medio mundo; y que además, podemos presumir de contar con una orquesta sinfónica -la de todos-, cuya impecable interpretación sorprendió al propio Jones. Un motivo de orgullo para la RTVE, teniendo en cuenta que el de Ciudad del Cabo normalmente exige trabajar con ese grupo de incombustibles profesionales como son los integrantes de la London Symphony Orchestra
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