Pablo Nieto
"La Ley de Los Ángeles" y "Ally McBeal". ¿Quién no ha visto alguna vez una de estas series? La primera absoluta dominadora de finales de los 80 y la segunda de los 90. Ambas ambientadas en el mundo de la abogacía. Dos éxitos sin precedentes en la historia de la televisión.
Su responsable tiene nombres y apellidos: David E. Kelley. Marido de Michelle Pfeiffer y uno de los grandes mitos de la televisión americana, junto a Stephen J. Cannell ("El Gran Héroe Americano", "El Equipo A", "Hunter"), Steven Bocho ("Canción Triste de Hill Street", "Policías de Nueva York") o Chris Carter ("Expediente X").
"Chicago Hope" fue uno de sus proyectos más ambiciosos. Una serie ambientada en un hospital de Chicago (el Chicago Hope Hospital), y que gira en torno a las relaciones entre el personal del mismo, médicos, enfermeras, personal auxiliar y sus pacientes. Vida, Amor y Muerte dentro de las frías paredes del hospital. Una serie que retomaba el espíritu de la mítica serie de los 80, "Hospital" (St. Elsewhere), pero que al mismo tiempo tenía que competir con otra producción de su mismo corte, "Urgencias" (E.R), lo que provocó que una estupenda serie como era "Chicago Hope" se viera absorbida por el potencial de cada uno de los episodios protagonizados por George Clooney y su equipo: ambas comenzaron a emitirse en 1994 y "Chicago Hope", tras 141 episodios, terminó en el año 2000, mientras que "Urgencias" todavía tiene cuerda para rato.
El reparto de "Chicago Hope" contaba con algunos actores realmente buenos como Mark Hammon, Eric Stolz, Hector Elizondo, Peter Berg o Christine Lati. Una serie que sin duda, ha dejado un buen sabor de boca a los aficionados.
En el apartado musical, como suele ocurrir en muchas producciones, el tema principal de la serie se le encarga a un compositor de renombre y el desarrollo del score capítulo a capítulo al currante de turno. En "Chicago Hope", Mark Isham escribe un dinámico y retentivo tema de cabecera. Un tema cuya esencia es respetada por el "currante", que en este caso tiene el nombre de Jeff Rona.
Rona trabajó en "Chicago Hope" de 1994 a 1998. Peter Bersntein, Lee Curreri y Roger Neil le sustituyeron hasta que terminó la serie.
Podemos definir su score para esta serie como un trabajo moderno, cosmopolita de sonoridades acústicas y emocionalmente rico. El propio Rona, en la entrevista que nos concedió en exclusiva, habla de su participación en esta serie: "Proyectos como "Chicago Hope" se basan en emociones, así que yo le di un toque muy diferente a mi forma de escribir. Mucho más tradicional. Usé un grupo de cuerdas en vivo cada semana, pero sólo cellos. ¡Hasta una docena! A esto le añadí la guitarra acústica, saxo soprano y trompeta. Yo ocasionalmente tocaba el pennywhistle u otra flauta, y eso es todo. Fue una producción muy exitosa que me hizo disfrutar. Producida por muy buena gente."
No suele ser habitual que se hagan ediciones tan completas de la música de una serie de televisión. Así que cuando esto se produce es justo reconocerlo. "Chicago Hope" es un disco fabuloso. Indispensable no sólo para los fans de Rona, sino para los amantes a la buena música para películas (incluyo las series). Casi 54 minutos, que incluyen algunos de los mejores temas escritos por Rona, destacando su modelo de tema principal no usado finalmente (al nivel del de Isham), la presentación de uno de los temas con los que trabajará Rona con más frecuencia durante la partitura en "McNeil Bets it All", la guitarra de "A New Hope" (con sonoridades cercanas a la música de carretera de Bruce Horsnby and the Range), el precioso tema de amor que es "A Lifetime of Love", con las cuerdas apoyadas por punteos de guitarra, o el intimismo de "Kate´s Comfort", donde hace acto de presencia el pennywhistle (también escuchado en el lírico "The Author´s Last Word").
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