Pablo Nieto

Arriesgada y extraña apuesta del director Sam Raimi por el género romántico, con un Kevin Costner de capa caída, y la siempre guapísima Kelly Preston. Esta historia de amor, contada a modo de flashback en la que un veterano pitcher ha de elegir entre el deporte de su vida y el amor de su vida, cuenta en su apartado musical con la participación de Basil Poledouris, y esto es siempre una grata noticia para el aficionado, pues la verdad es que en los últimos años el compositor de "Conan" no suele prodigarse demasiado. De hecho, "Entre el amor y el juego" es su último gran score hasta la fecha, más que nada porque desde entonces parece haberse olvidado de lo que es la composición para el cine. Una verdadera lástima sin lugar a dudas.

Cómo suele ser habitual, su música trasciende a las imágenes. Para "Entre el amor y el juego", escribe un score delicioso, con un tema de amor, sustentado en la guitarra acústica y una preciosista utilización de la orquesta, realmente inspirado, y que podemos escuchar en cortes como "Main Theme" o "Relationship Montage".

Por si no fuera poco, Poledouris nos regala también dos cortes que harán vibrar a los amantes de su estilo sinfónico, como son "The Decision" y "The Last Pitch". Dos piezas antológicos, escritos para coros y orquesta, y utilizados para describir el partido final de Kevin Costner.

Sin duda, una banda sonora imprescindible en cualquier colección, sobretodo si se es admirador del compositor californiano.