Tangerine Dream
Biografía
Edgar Froese, un joven con inquietudes artísticas, estaba aprendiendo pintura y escultura cuando queda absorto del particular mundo que se había fabricado Salvador Dalí en su villa de Cadaqués. Cuando en 1967 acude a una de las fiestas salvajes del pintor para amenizar la velada musicalmente, encuentra a toda una serie de artistas de la cultura europea y queda prendado por los pasionales actos que allí tenían lugar mezclando imagen, literatura, pintura, sexo, y música. Tal es su excitación ante tanto caudal de conocimientos que cuando regresa a Berlín, con sus básicas nociones de guitarra, decide crear un movimiento musical libre y experimental basado en los conceptos artísticos aprendidos, y a todas esas innovadoras ideas las denomina “Tangerine Dream” (“Sueños de mandarina”).
Evidentemente le era muy complicado encontrar otros compañeros que se involucrasen en esta forma de sonidos, ya la mayoría le consideraban una especie de iluminado al querer convertir el arte en algo auditivo. Hasta que en 1969 aceptan su propuesta el batería Klaus Schulze, y los estudiantes de arte Konrad Schnitzler y Joseph Beuys, grabando entre los cuatro sesiones de improvisación llamadas “Electronic Meditation”, que se convirtieron en el primer album del grupo en 1970.
Abandonado por sus recientes colaboradores (en especial de Schulze, quien en 1977 escribiría la partitura del film erótico Body Love), Froese busca nuevos nombres para su causa y en 1971 encuentra a Christopher Franke, que también gustaba de nuevas formas musicales, y cuando un año después se les une Peter Baumann queda conformada la base artística-musical buscada en un principio. El estilo pionero de “Tangerine Dream” rompe los esquemas conocidos hasta el momento, y constituye todo un acontecimiento por sus atrevidos sonidos de sintetizador, vanguardismo melódico e impactante percusión.
La polémica deseada por su creador siempre acompañó a la banda (en el mercado anglosajón, el crítico de la revista “Melody Maker” escribió en 1974 con respecto al éxito en Alemania de su disco “Phaedra”: “la gente consume mierda porque cien mil moscas no pueden equivocarse”), pero nunca tan intensamente como cuando decidieron incorporarse al mundo de las bandas sonoras. Esto llevó a la desesperación de algunos aficionados obcecados en las melodías clásicas e incapaces de comprender los avances en el campo de la electrónica que la formación aportó al cine en todo tipo de películas ("Ojos de fuego", "Flashpoint", "The Keep"...). Su obra más notoria en el cine, para bien o para mal, fue el score escrito para la versión americana de "Legend", ya que la versión europea del filme conservó la partitura original compuesta por el maestro Jerry Goldsmith.
Desde finales de los 70 “Tangerine Dream” sufrió distintos cambios en sus miembros:
- 1978, Baumann decide irse del grupo, entrando un nombre fundamental para la creación de sus míticos shows en directo de luz y sonido, Johannes Schmoelling;
- 1985, Paul Haslinger llega para sustituir a Schmoelling;
- 1987, se produce la salida de Chistopher Franke, resintiéndose desde entonces los arriesgados discos de la banda;
- 1988-1991 es el periodo The Melrose Years, contando solo con Froese y Haslinger;
- y de 1991 a 1995 son llamados The Seattle Years, cuando abandona Haslinger y se quedan Edgard Froese y su hijo Jerome, perdiendo ya totalmente el rumbo y forzando hasta la extenuación sus sonidos de antaño.
Influencias: Música extraída de los principios del movimiento dadaísta, del surrealismo de Breton y Buñuel, las novelas de Henry Miller, las pinturas de Picasso, la arquitectura modernista de Gaudí, y la poesía de Walt Whitman.
Obras no cinematográficas: Entre su medio centenar de discos editados encontramos: “Atem” (1972); “Rubycon” (1975); “Tangram” (1980); “Le Parc” (1985), la última grabación con Johannes Schmoelling; “Underwater Sunlight” (1986); y “Optical Race” (1988), que fue el primero que hicieron tras la decisiva marcha de Franke.
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